lunes, 29 de junio de 2009

Shiba

Ayer enterré a mi perra Shiba, en la ribera del Ebro en un lugar apartado, bajo unos fresnos y unos chopos. Junto a Fara, Nuska, Roy y su madre Wanda. Son varios los perros/as que me han dado su cariño, pero Shiba ha sido la primera con la que he estado desde su nacimiento hasta casi su muerte. La primera a la que ayudé a nacer cuando Wanda se puso de parto una noche de otoño a las 3 de la mañana hace 12 años, y la primera a la que he tenido que enterrar yo mismo. Es increible el cariño que puede dar un perro sin pedir nada a cambio. Pronto vendrá otro perro u otra perra que le sustituirá en los juegos ... así ha sido siempre ... ý así seguirá siendo para todos ... así es la vida ... y así es la vida de un perro.